El examen auditivo en los bebés es uno de los 4 tamizajes que se realizan al nacer: tamizaje metabólico o TSH, tamizaje visual para determinar si tiene catarata congénita y tamizaje cardiológico para descartar alteraciones estructurales del corazón.
¿Qué tan frecuente es la pérdida auditiva en los niños?
Tres de cada 1000 bebés tienen cierto grado de pérdida auditiva, sin el examen de audición será difícil detectarlo. Más de la mitad de aquellos con pérdida auditiva NO presentan síntomas.
Existen niños con mayor riesgo: los prematuros (menores de 37 semanas), los nacidos con menos de 2500 gramos, bebés con malformaciones de cabeza y cuello, los que necesitaron reanimación al nacer, aquellos que tuvieron fototerapia por bilirrubina elevada, niños con síndrome de Down, infecciones al nacer, necesidad de hospitalización con antibióticos, niños con labio leporino, entre otros.
¿Por qué los bebés necesitan un examen de audición?
El oído es uno de los canales de aprendizaje de tu hijo, así como su visión, el tacto y el olfato. El examen auditivo es importante para detectar pérdidas auditivas a tiempo y así establecer una intervención temprana idealmente antes de los 6 meses. El hecho que tu niño se sobresalte o volteé su cabeza tras escuchar un sonido no quiere decir que escuche al 100%. La mayoría de los bebés que tienen pérdida auditiva pueden escuchar algunos sonidos, pero no pueden escuchar lo suficiente como para desarrollar la habilidad de hablar.
¿Cómo se realiza el examen de Audición?
Se pueden practicar dos tipos de exámenes:
EMISIONES OTOACÚSTICAS (EOA)
Este examen mide las ondas sonoras producidas en el oído interno. Una pequeña sonda se coloca en el canal auditivo externo que recibe la reacción (eco) cuando se transmiten golpecitos o tonos al oído del bebe.
POTENCIALES EVOCADOS AUDITIVOS
Este examen mide la reacción del cerebro al sonido. Consiste en colocarle unos audífonos a los oídos del bebe asociado a tres electrodos en su cabeza. Se puede realizar en ambientes ruidosos y permite diagnosticar patologías más profundas.
Ambos exámenes son rápidos, no causan dolor y se pueden realizar con el bebé dormido o muy quieto. En bebés prematuros es aconsejado realizar ambos exámenes.
¿Qué sucede si mi bebé tiene su audición alterada?
Tu bebé a continuación deberá ser valorado por otras especialidades como un otorrinolaringólogo o un audiólogo, y es posible que requiera estudios aún más especializados, todo depende del grado de pérdida auditiva, sin embargo, estos trámites deben efectuarse lo más pronto posible para mejorar el pronóstico.
Algunos problemas específicos
Ten en cuenta que algunos tipos de pérdida auditiva se desarrollan a medida que el niño crece, si tu bebé tiene ciertos factores de riesgo como los mencionados arriba, el pediatra debe coordinar exámenes auditivos regulares y cerciorarse de que tu bebé siga escuchando bien.
Recuerda:
En PEDIATRICARE contamos con el servicio de EMISIONES OTOACÚSTICAS, donde y en segundos podemos determinar la salud auditiva de tu niño o niña. Antes del procedimiento evaluamos en forma exhaustiva el conducto auditivo externo, para determinar la presencia de infecciones u alteraciones a este nivel, además de ser necesario retiramos el cerumen que impida la realización del procedimiento.
Te sentirás muy segura al saber que tu niño escucha bien.